El Rifugio Lilla surge de la recuperación de una antigua casa que data de 1700, con una estructura cómoda y acogedora, caracterizada por su color inconfundible.
Renovado de acuerdo con los principios de eco-sostenibilidad con el uso de calefacción de pellets, iluminación LED y con parte de los muebles restaurados. Situado en la antigua aldea de Grande Golette, cerca de la parada del servicio de transporte gratuito de invierno. En el Rifugio encontrará el perfecto equilibrio entre la proximidad de las pistas y el centro del pueblo. En verano, sin embargo, es cómodo como punto de partida para excursiones hacia panorámicas llenas de encanto. Las habitaciones, con entrada independiente, ofrecen un ambiente relajado e informal en el que el pasado se encuentra con el futuro. En la planta baja disponemos de un acogedor restaurante con techos abovedados de piedra, recuperado de las antiguas bodegas, donde por el momento solo servimos el desayuno. Las mascotas pequeñas que respetan la tranquilidad de otros clientes son bienvenidas.