Algunos itinerarios de raquetas de nieve

La excursión con raquetas de nieve comienza en el Ayuntamiento de Ayas, justo encima de la iglesia parroquial de Antagnod. El número de sendero del sendero es el 105, que sube entre coníferas hasta llegar a la pequeña aldea de Barmasc, que recibe a los senderistas con uno de los ya famosos "Big Bench", bancos gigantes de colores.

Continuar por la carretera nevada hasta llegar a la salida del sendero que se dirige al refugio Barbustel: girar a la derecha y comenzar a subir la escarpada parte inicial del sendero, bordeado por barreras de madera. Ganar altura hasta encontrar, pocos minutos después, el desvío para Arcomy. Atravesar un tramo de bosque de alerces para después llegar a una pequeña depresión que hay que dejar atrás con varias curvas. Durante la subida, dejar a la derecha una alzada solitaria y continuar por un amplio canalón que lleva rápidamente a las inmediaciones de las ruinas de Grand. Un poco más adelante, se encuentra la señal que indica el paso Terra Rossa; continuar hacia la izquierda por la pendiente, que se hace un poco más suave, y después girar hacia la derecha pasando bajo una gran roca.
A continuación, dejar atrás un paso un poco estrecho para llegar a la suave pendiente que lleva a la meseta del lago Muffé. Dejar atrás las ruinas, en las inmediaciones del lago, y comenzar a subir hacia el Col du Lac Blanc. Ahora, continuar por entre poco espesos alerces por una subida no demasiado dificultosa hasta llegar, finalmente, al paso.

Desde el aparcamiento, continuar por la carretera durante unos cientos de metros hasta llegar a una curva hacia la derecha: desde aquí, normalmente, la carretera está nevada y, por lo tanto, se puede comenzar el recorrido.
Recorrer un primer tramo del trazado en dirección hacia el fondo del valle y después girar 180º, describiendo una curva hacia la izquierda, y comenzar a adentrarse en el cañón del Ayasse. El recorrido discurre por la carretera rural que, en el período de verano, lleva a Dondena; tras algunos minutos de caminata, se llega al punto de partida del sendero que se dirige al refugio Barbustel: obviamente, es necesario ignorar el desvío de la derecha, que se dirige al refugio, y continuar por la pista pasando bajo los contrafuertes del Mont Ros y el Bec Barmasse. Tras atravesar algunos canales de avalanchas (hay que prestar mucha atención si la nieve no es estable), continuar subiendo ligeramente en dirección oeste hasta llegar al desvío del lago Raty. Seguir por la pista principal, que poco después gira ligeramente a la derecha ofreciendo una hermosa vista de la imponente pared rocosa del Bec Raty. Lentamente, la vaguada se abre: a la izquierda aparece el saliente nevado de la Cimetta Rossa y, un poco más abajo de nuestro itinerario, el pueblo de Champlong. Tras dejar atrás la alzada de Tuerie, la pista se dirige, continuando la subida, hasta el punto de partida del itinerario de verano del lago Miserin: aquí hay una serie de señales que indican los diversos senderos que se pueden tomar y un hermoso mapa de la zona, y resultan bien visibles tanto Dondena como el refugio que está un poco más arriba.
Bajar durante unos pocos metros hasta cruzar el arroyo Ayasse y después subir de nueve atravesando las ruinas del hotel Alpino hasta llegar al refugio Dondena (2193 m).

Partiendo de Son-le-Prò, continuar a la izquierda de la carretera municipal que conduce a Valnontey. Entre subidas y bajadas en el bosque, atravesando pequeños puentes de madera y siguiendo la pista de fondo que desciende hacia la capital, se llega a la aldea de Valnontey, en el corazón del Parque Nacional del Gran Paradiso.

El mapa de los itinerarios de la zona está distribuido en la Oficina de Turismo de Cogne (itinerario nº 5).

Desde el centro de Cogne seguir a lo largo de la carretera municipal hacia Lillaz hasta la pequeña capilla de Moline. A la derecha, donde hay el cartel que indica el inicio del recorrido, tomar el senderito que, subiendo, supera la pista para el esquí de fondo para Lillaz y llega al “Stambeccaggio” (Centro de Estudio de la Alpina). Cruzar el prado subyacente el “Stambeccaggio”, siempre tomando la derecha, e internarse en el bosque. Después del cruce con la pista para el esquí de fondo seguir subiendo a la izquierda hasta una bifurcación, donde empieza el anillo que puede ser recorrido en las dos direcciones. Si se continua en sentido opuesto a las agujas del reloj el recorrido llega al café y después continua costeando las pistas de esquí de fondo y cruzando el maravilloso llano de Sylvenoire. Al golpe de timón, posibilidad de bajar hacia Champlong o Lillaz. El regreso, que se desarrolla completamente en el bosque, se caracteriza por unas subidas y bajadas entre muchísimas figuras creadas por piedras, plantas y cristales de nieve.

Desde el aparcamiento, remontar durante un breve tramo la carretera hasta llegar al pequeño puente que atraviesa el arroyo de Valnontey: continuar hasta llegar al hotel “Lou Tsantelet” y las señales que indican los itinerarios por la Alta Vía nº 2. Enfilar el cómodo sendero que llega, en breve, a la entrada del jardín alpino “Paradisia”. Bordear el lado sudoriental del jardín y entrar en el bosque de alerces. Ganar altitud lentamente siguiendo las amplias curvas del camino de herradura mientras se disfruta de algunas vistas sobre el Valnontey, que está debajo. Tras aproximadamente una hora de camino, se llega a una bifurcación: ignorar el desvío de la derecha y continuar en línea recta hasta encontrar un hermoso puentecillo de piedra que permite cruzar el arroyo Grand-Lauson. Después, remontar la derecha orográfica del cañón, siempre entre los alerces, hasta salir del bosque. Continuar siempre subiendo hasta llegar a los caseríos de Pascieux. Seguir avanzando por el ala hasta las alzadas de Grand Lauson y, manteniéndose en la derecha orográfica del impluvio, atravesar finalmente el arroyo y llegar a la característica meseta en la que está situado el refugio Vittorio Sella.

Después de haber dejado el coche en el vasto parking al inicio del poblado de Valnontey, seguir a lo largo de la derecha orográfica del torrente con el mismo nombre hasta el primer puente en madera. Cruzar el puente y seguir a lo largo de la huella que sube a la izquierda orográfica, siempre sin pisar las pistas de fondo. Justo después de la alpe en loc. Prà-su-piaz, el sendero se hace más estrecho y cruza de nuevo un puente, volviendo a la derecha. El recorrido llega hasta los caseríos de la alpe Vermiana. El regreso se hace a lo largo del mismo recorrido. Como la ruta es muy concurrida, frecuentemente se puede hacer a pie también.

Ruta anillada sencilla, sin peligros y muy soleada, que alterna trozos en los bosques a paisajes muy panorámicos.
La ruta empieza en la zona norte de la aldea de Gimillan, donde se situa el cartel que indica el inicio de la ruta; a la pequeña capilla seguir todo recto a lo largo del torrente. Una vez alcanzadas y superadas los pocos edificios en localidad Pian di Teppe tomar a la izquierda y seguir en llano hacia la localidad Serve. Un amplio sendero lleva al bosque y, con una curva cerrada en descenso, conduce a un claro en dirección de Gimillan. En poco tiempo, admirando unas superbas vistas sobre la cadena del Gran Paraíso y la Grivola, se llega de nuevo a la aldea y al punto de partida.

Remontar una carretera asfaltada y a menudo helada hasta llegar a un chalé que se encuentra a la izquierda: aquí se pueden poner las raquetas y comenzar el itinerario por la nieve. Remontar durante un breve tramo la pista nevada, siempre batida, que bordea el arroyo helado procedente del Val Sapin hasta encontrar una barrera, en los alrededores de la cual hay señales y un panel que contiene un mapa temático de los senderos del Espace Mont Blanc: continuar por el sendero 42. Remontar la pista batida, situarse en la derecha orográfica y continuar hasta encontrar el desvío hacia el refugio Bertone, bien indicado por sellos amarillos y una señal.
Remontar el sendero de verano, a menudo batido, escarpado ya desde sus comienzos; la subida continúa dejando atrás los últimos abedules y adentrándose en un hermoso bosque en el que predomina el abeto rojo. Remontar la pendiente describiendo una larga serie de curvas hasta llegar a un monumento de piedra dedicado al Batallón Aosta de alpinos.
La subida continúa describiendo una larga diagonal hacia el sur hasta llegar a un tramo de pendiente sin vegetación de tronco alto; remontarlo con una sucesión interminable de curvas; mientras tanto, al frente se va abriendo la vista de los montes de La Thuile: del Mont Colmet al Mont Crammont. Tras aproximadamente una hora de caminata, se llega a una segunda diagonal en dirección sur: recorrerla prácticamente en llano para después volver a subir otra vez entrando en el bosque, en el que ahora predominan los alerces. Poco después, se llega a otra larga diagonal que se dirige hacia el sur: puede resultar difícil si el trazado no está batido o la nieve está helada. Tras esta, se puede ver ya el final del itinerario; de hecho, muy pronto se llega a los pastos nevados que están bajo el refugio. Finalmente, se abandona el bosque para entrar en un ambiente excepcionalmente panorámico que la blancura de la nieve vuelve todavía más sublime; al llegar a una señal, girar hacia la derecha y, tras dejar atrás un pequeño desnivel, se llega finalmente al refugio Bertone.

Prestar mucha atención a las condiciones de la nieve: esta excursión resulta relativamente sencilla con poca nieve o nieve muy estable, pero se vuelve muy complicada si no hay mucha nieve y el trazado no está bien batido.

Desde Planpincieux, dirigirse al comienzo de las pistas de fondo de Val Ferret. Enfilar la pista peatonal que flanquea las pistas y se adentra en el valle. Bordear primero el camping Grandes Jorasses y, unos diez minutos más adelante, se llega a una pequeña capilla: a partir de aquí, el recorrido se vuelve ligeramente más plano y se adentra en el valle ofreciendo soberbias vistas de la Tête de Ferret. El recorrido, de suave pendiente, pasa por Pont, Tronchey y Praz Sec d’en Bas. Tras dejar atrás estos últimos caseríos, el itinerario bordea la Doire de Ferret y, finalmente, llega a Lavachey.
Desde Lavachey, continuar por las pistas de fondo en dirección nordeste hasta llegar a unas cuantas curvas; tras dejarlas atrás, se entra en un bosque de abetos y se llega al desvío para el refugio. Enfilar el sendero de verano girando a la derecha según las indicaciones de las señales y comenzar a subir por el bosque de forma con un recorrido bastante evidente, aunque no haya trazado. Se va ganando altura constantemente hasta llegar a una segunda señal inmersa en la nieve: girar a la izquierda y continuar subiendo por la franja boscosa describiendo varias curvas que permiten dejarla atrás y llegar a los pastos nevados que están bajo el refugio. Remontar este último tramo con una subida muy marcada que discurre ya fuera del bosque: aparece el refugio y, sobre todo, se abre una soberbia vista del Mont Blanc. Tras superar estos últimos metros de subida, se llega, finalmente, al refugio Bonatti (2026 m).