Se trata de rocas o piedras en las que se grabaron, con piedras duras o punteros metálicos, pequeños agujeros cóncavos en forma de copa. Estos objetos prehistóricos datan de la Edad del Bronce tardía y de la Edad del Hierro. Todavía no se sabe con certeza para qué servían estas incisiones: algunos expertos piensan que las piedras copeladas se empleaban en rituales religiosos y propiciatorios. En el territorio de Hône, hay piedras copeladas en Montoulin (900 m) y en la localidad de Plan Priod (465 m).