Sitio web oficial de turismo en el Valle de Aosta
Creadas a principios de los noventa, las reservas naturales del Valle de Aosta protegen especies animales y vegetales a menudo raras o en peligro de extinción, sus hábitats y formaciones geológicas, geomorfológicas y espeleológicas de particular valor histórico, científico y cultural.
Un lugar de gran interés arqueológico y natural
La colina, de empinadas laderas pero cima plana, se encuentra al nordeste de Aosta.
La reserva natural abarca 14 hectáreas y su altitud está comprendida entre los 720 y los 796 metros.
Curiosidad: los scouts de Aosta llaman a esta colina “Quota B.P.” (Baden-Powell, fundador del movimiento boy scout).
Se trata de un área de notable interés geomorfológico y arqueológico, con aspectos paisajísticos típicos de las laderas de baja montaña con exposición meridional.
En el Neolítico Tardío (aprox. 3000 a.C.), un asentamiento humano ocupaba la cima de la colina.
La zona es un excelente punto de observación del vuelo de las aves durante los períodos migratorios, particularmente de algunas rapaces y córvidos. Además, la reserva alberga algunos mamíferos, reptiles y varias especies de invertebrados. Las características climáticas de la zona favorecen el desarrollo de una vegetación típicamente xerófila caracterizada predominantemente por el bosque de roble pubescente y plantas de origen estepario.
Cómo llegar
Desde la salida Aosta Est del autopista A5, seguir la carretera nacional 26 en dirección a la ciudad. A la segunda rotonda girar a la derecha dirección Porossan y seguir hacia Saint-Christophe hasta llegar al pequeño aparcamiento a la entrada de la reserva..
Un lago glacial en una cuenca que es mosaico de especies vegetales
El pequeño lago de Lolair, a 1175 m de altitud, está alimentado por tres fuentes y rodeado por un tupido cañaveral y las características rotas amontonadas, montículos redondeados y pulidos de origen glacial. El lago cuenta con una rica población planctónica, que en la región solo se puede comparar a la de Lozon, y una vegetación de notable valía.
Flora
El pantano alberga numerosas especies nadadoras, como la lila de agua (Potamogeton natans) y la utricularia (Utricularia australias); en los alrededores de las riberas y los canales, aparece también el trébol de agua y, a lo largo de los pequeños arroyos, se pueden observar abundantes poblaciones de hierba centella (Caltha palustris) y de cariofilada acuática (Geum rivale). La árida vertiente occidental se caracteriza por una vegetación xerófila, con matorrales de jengibre (Juniperus sabina), floraciones de heliantemo mayor (Helianthemum nummularium) y, en campos abandonados desde hace tiempo, la principal estación alpina de la rarísima Potentilla pensylvanica.
Fauna
En las crestas rocosas, es fácil divisar el águila real, el azor o el busardo ratonero y, en torno al lago, aves típicamente acuáticas como el ánade real, que hace su nido aquí, y la polla de agua.
En el pantano y sus alrededores viven anfibios y reptiles como el sapo común (Bufo bufo) y la culebra del collar (Natrix natrix), mientras que las aguas del lago están pobladas de tenca, invertebrados y numerosas familias e insectos.
Cómo llegar
Desde Arvier tomar la carretera regional 26 en dirección Courmayeur y girar a la isquierda siguiendo para Leverogne - Valgrisenche, hasta llegar a la pedanía La Ravoire.
Algunos senderos empiezan tambien en la pedanía de Baise Pierre.
Hermosos florecimientos de especies alpinas en la tranquilidad de un entorno salvaje
La reserva regional ha sido instituida en 2013 y se encuentra completamente en el territorio del municipio de Bionaz. Tiene una superficie de más de 1.100 hectáreas que se desarrolla de los 1.573 metros del fondo de valle hasta los 3.321 metros de altitud de Becca-des-Arbyères.
Ubicado en la vertiente izquierda del torrente Buthier, el valle ofrece a los visitantes los paisajes típicos de los ambientes sub-alpinos y alpinos, con dominio de bosques mixtos de alerces y abetos rojos (píceas); desde la confluencia del torrente Montagnayes hasta el confín con Oyace están presentes “rocas boscosas”, una clase interesante donde aparece el abeto blanco, insólito en este ambiente.
Subiendo hacia las crestas, los bosques dejan espacio para matorrales enanos, pastizales y prados alpinos, con especies de flora raras a nivel de todo el arco alpino y regional.
Ya en el pasado oasis de protección de la fauna, la reserva protege gamuzas, cabras montesas, ciervos y corzos.
Se certifica también la presencia de liebres y marmotas, depredadores como lobos, tejos, martas, garduñas y rapaces como el águila real y la lechuza enana. También anfibios, reptiles y muchas mariposas diurnas pueblan este ambiente natural rico y aún incontaminado.
El verano es el mejor período para visitar la reserva, que permite admirar espléndidos florecimientos (de genciana acaulis, lirio martagón, rododendro ferrugineum y otras flores alpinas) inmersos en la paz de un ambiente salvaje.
En otoño, en especial en setiembre y octubre, cuando los bosques de abetos y alerces se tiñen de colores otoñales, una excursión en la comba de Montagnayes ofrece panoramas excepcionales.
En el período invernal, al contrario, la densa capa de nieve y el peligro de avalanchas hacen inaccesible el área y su goce.
Acceso
Desde Aosta, se recorre la SS n. 27 del Gran San Bernardo hasta el cruce de Variney y se sigue luego por la via regional n. 28 hasta Bionaz, desde donde se continua, en dirección del lago de Place Moulin, hasta la localidad de Ferrère, donde se estaciona el auto.
Desde Ferrère parten las excursiones hacia el refugio alpino Arp-Damon (1h30 – señal 15) y para el Vivac Chentre-Bionaz (3h – señal 14).
En el fondo del Valle de Aosta, un hábitat ecológico de gran interés
Ubicación: junto al cauce del Dora Baltea, a la altura de Brissogne.
La reserva natural abarca una superficie de 35,4 hectáreas y su altitud está comprendida entre los 526 y los 532 metros.
Este ambiente de ribera del medio valle central, situado en una zona antes ocupada por un meandro del Dora Baltea, se caracteriza por la presencia de dos lagos de cantera con riberas en gran parte renaturalizadas.
La reserva es el sitio más importante de la región de parada y abastecimiento para la fauna avícola migratoria; también muchas especies hacen aquí su nido. Se pueden encontrar anfibios, reptiles y, en las aguas de los lagos, tencas y lucios.
La vegetación, característica del antiguo paisaje de la ribera, hoy desaparecido en casi todo el valle, está formada por carrizos, juncos, cárex y algunas plantas de particular valor, como la Typha minima.
Cómo llegar
Desde Aosta, toma la carretera nacional 26 en dirección a Turín y girar a la derecha en el puente de Brissogne. Continuar caminando a lo largo de la pista que flanquea el rio Dora Baltea hasta llegar al entrada de la reserva, indicada por un letrero.
Lago glacial, alimentado del subsuelo, refugio de interesantes especies
La reserva natural del Lago de Villa fue instituida en 1982 y tiene una superficie de 25 hectáreas, a una altitud comprendida entre los 810 y los 980 metros.
Un oasis de paz donde escuchar los sonidos de la naturaleza y admirar las montañas que lo rodean. Es interesante visitarlo en todas las estaciones, para admirar los colores de las hojas cambiantes, así como las especies de plantas y animales que lo habitan.
Aquí hay alguna información sobre el área protegida:
Accesibilidad
El lago es accesible para todos, incluso para las personas con discapacidad: en las inmediaciones de la entrada al camino que conduce al lago, de hecho, hay un estacionamiento para discapacitados y la superficie de la carretera ha sido completamente pavimentada, para también permiten que las sillas de ruedas se muevan cómodamente.
Como llegar
La carretera municipal que conduce al sitio está bien indicada en el cruce a lo largo de la carretera regional 45 del Valle de Ayas, después del pueblo de Challand-Saint-Victor, con un cartel que indica “Reserva Natural del Lago Villa”. 2,5 km después de esta bifurcación se llegará a un pequeño estacionamiento ubicado directamente al costado de la carretera: allí un panel explicativo describe el sitio y sus principales senderos.
Un ambiente alpino de fauna y flora de gran riqueza
La Reserva Natural del Mont Mars fue instituida en 1994; tiene una extensión de 390 hectáreas y está situada en la cabeza del cañón del arroyo Pacoulla. A la reserva se llega por la carretera que sale de la pedanía de Pillaz y se dirige al alpe de Vargno. Continuar por un sendero empedrado señalado con el número 2 (negro sobre fondo amarillo): es el sendero principal, que atraviesa toda la reserva del oeste al este y lleva al Col de la Balma (2259 m) y después al Santuario de Oropa, en la provincia de Biella.
Geología: predominan las morfologías de origen glacial, entre las que destaca la sucesión de cuencas de roca dispuestas en escalón; actualmente, predominan las pequeñas cuencas lacustres y turberas. Del antiguo glaciar que ocupaba el barranco hasta hace 10.000 años, solo queda una modesta huella en el ventisquero situado en el pequeño circo que está al pie de la ladera norte del Mont Mars. Las rocas predominantes son los esquistos micáceos atravesados por bancadas blancas de mármoles y oscuras rocas básicas.
Flora: se pueden ver amplios bosques de alerces interrumpidos por zonas de arbustos (rododendros, arándanos, jengibres enanos). A más altura, se extienden los pastos, interrumpidos por la gran difusión de las rocas y pedregales; aquí se pueden encontrar la genciana púrpura, la árnica y la nigritella. En los pedregales se puede observar el doronic austríaco, infrecuente en el Valle de Aosta. En las escarpadas pendientes soleadas, encontramos el lirio de monte y la betónica densiflora. En la base de los pastos áridos, resulta hermoso el contraste con las zonas húmedas de la cuenca del Leilong, donde se encuentran el esparganio y el ranúnculo acuático.
Fauna: comprende especies típicas de los planos subalpino, alpino y nival. En las zonas húmedas y lacustres se pueden observar también la rana bermeja, la trucha lacustre y el mirlo de agua. Los prados y praderas alpinas son hogar de la víbora común, la codorniz, la chova, el bisbita ribereño, el colirrojo tizón, el arrierito, la marmota, la gamuza, la liebre de las nieves y el zorro. En la vertiente norte del Mont Mars, viven la perdiz blanca y el pinzón alpino (aves características de los valles nivales). El territorio de la reserva es el lugar de caza del águila real.
Como llegar a la reserva
Desde Pont-Saint-Martin seguir las indicaciones hacia Gressoney por la carretera regional n. 44.
Una vez en Fontainemore, después de aproximadamente 1 km, girar a la derecha cruzando el puente sobre el arroyo Lys y subir por el lado izquierdo durante 11 km hasta llegar a Pian Coumarial, donde puede estacionar su automóvil y continuar a pie.
Forjado de forma llamativa por los glaciares, un hábitat envuelto por el sol
El espolón de forma alargada –la “côte“–, que tiene su origen en depósitos de origen glacial, es uno de los elementos más significativos de esta reserva natural, que debe su nombre a una leyenda según la cual la côte es el dedo meñique del gigante Gargantúa, personaje inventado por Rabelais, que quedó enterrado bajo una manta de escombros.
Una antigua historia que acompaña a las de las muchas especies animales y vegetales que viven en este ejemplo típico de ambiente estepario, caracterizado por pendientes y laderas rocosas y herbáceas, áridas y sometido a la intensa luz del sol.
Flora
Entre las especies más representativas se encuentran la Artemisia vallesiaca, una rara planta aromática y el Telephium imperati, de origen mediterráneo.
Fauna
La reserva es un entorno ideal para pequeños roedores, rapaces, paseriformes, invertebrados y reptiles como la lagartija roquera, el lagarto y la culebra verdiamarilla. La entomofauna es particularmente rica; de hecho, hay numerosas especies de lepidópteros y coleópteros típicos de ambientes áridos.
Gracias a su excelente exposición, la reserva se puede visitar sin problemas incluso en los meses de invierno; no obstnate, la primavera y el otoño siguen siendo las mejores estaciones para disfrutar de un clima templado y de sus hermosos colores.
Cómo llegar
Viniendo en coche desde el centro de la ciudad de Aosta, la Côte de Gargantua es claramente visible desde la carretera de Envers (carretera que conecta los municipios del fondo del valle situados en la vertiente derecha de la Dora Baltea). En la rotonda de Pont-Suaz, tome la carretera regional 20 en dirección “Gressan–Jovençan–Cogne”. Los itinerarios que conducen a la reserva parten de diferentes puntos, pero dada la limitación de espacios de estacionamiento en los pequeños aparcamientos de las aldeas, es aconsejable dejar el automóvil en las áreas del Municipio de Gressan, en el lado izquierdo de la carretera.
En autobús: línea 5: Aosta - Aymavilles (parada en el municipio de Gressan)
Hábitat interesante, parada de aves migratorias tras vuelos a gran altitud
El sitio se encuentra junto al cauce de la Dora Baltea, en las inmediaciones de la presa situada entre los municipios de La Salle y de Morgex.
Flora: los bordes de la barrera están poblados de cañas, mientras que, a una cierta distancia del agua, se pueden ver alisos, sauces y chopos. Entre las flores destaca el ranúnculo amarillo.
Fauna: esta zona es lugar de parada para las aves migratorias que viven en ambientes húmedos; aquí hacen sus nidos el ánade real, la polla de agua y la bijirita.
Visita:
Los mejores meses para visitar la Reserva son durante las temporadas migratorias de primavera y otoño, no sólo por el avistamiento de la fauna ornitológica sino también por la exuberancia del sotobosque de sus bosques.
La visita se puede iniciar por el margen izquierdo, entrando desde la carretera estatal S.S. 26. Aquí, un cartel con el plano del lugar ofrece información variada para dar la bienvenida al visitante. Se puede llegar a la orilla en pocos minutos y desde el cobertizo equipado se puede observar la fauna detenida sobre las aguas crecidas. Un sendero peatonal bien señalizado dirige al visitante hacia una pasarela elevada que atraviesa el bosque higrófilo hasta llegar a un pequeño islote a la salida del recinto, rico en especies vegetales en plena actividad. Para el regreso se utiliza el mismo camino.
Pequeña cuenca lacustre, valioso hábitat de especies poco frecuentes
Instituida en 1994, esta reserva natural tiene una extensión de 1,5 hectáreas. Está situada a 750-790 metros de altitud, en el municipio de Pont-Saint-Martin, cerca del castillo de Suzey.
Flora: la zona húmeda permite la presencia de carrizos y juncos silvestres; también es la única estación valdostana conocida de salicaria.
Fauna: debido a sus reducidas dimensiones, la reserva muestra únicamente algunos ejemplares raros de anfibios, entre ellos dos especies de tritones.
Como llegar
Desde el centro de Pont-Saint-Martin tomar la carrettera regional para Gressoney, girando a la derecha a la altura del cartel que índica la pedanía de Ivery y siguiendo hasta la localidad Holay.
Concentración de procesos naturales en un hábitat de enorme riqueza
Antiguo estanque en avanzado estado de enterramiento, situado en una terraza glacial, en el corazón de una región de clima soleado y seco.
El lago alberga una rica población de zooplancton, numerosos invertebrados, como varias especies de libélulas y anfibios como el sapo común y la rana bermeja. En la reserva hay más de quince asociaciones vegetales diferentes y casi setenta especies típicas de hábitats húmedos y acuáticos, algunas de ellas muy infrecuentes o únicas en el Valle de Aosta.
La reserva natural es una Zona Especial de Conservación (ZEC) de la red ecológica europea Natura 2000.
Cómo llegar
Desde Aosta, enfilar la carretera nacional 26 en dirección a Turín; al llegar a Chambave, seguir las indicaciones para Verrayes y Loson.
