La Magdeleine en miniatura, la maqueta en relieve a escala 1:87 que representa fielmente hasta el más pequeño detalle de la localidad del Valle del Cervino, se puede admirar en el Ayuntamiento.

Su creador, Mario Castelli, jubilado y artista, eligió vivir en La Magdeleine en 1990, después de haber trabajado durante mucho tiempo como funcionario y vidriero para prestigiosas empresas francesas y belgas; desde hace unos veinte años trabaja durante cuatro o cinco horas al día en una sala del edificio municipal para crear una obra maestra en miniatura, la maqueta de La Magdeleine con sus cinco pedanías.

Se ha reproducido todo: la iglesia parroquial, los 200 edificios, el ayuntamiento, las áreas verdes, las calles, los molinos, los arroyos e incluso a los magdeleins y los veraneantes (algunos de ellos se han reconocido, asomados a los balcones, mientras charlan entre ellos o de paseo con el perro…).