Villa Romana de la Consolata
Localidades: Aosta
La Villa Romana della Consolata puede visitarse, exclusivamente con reserva previa, a partir del 27 de noviembre de 2025, todos los jueves de 10:00 a 13:00 y los sábados de 14:00 a 17:00.
Para reservar, llame al número +39 0165 275911, a ser posible al menos un día antes de la visita.
Cerrado 25 diciembre y 1° de enero
Los horarios pueden estar sometidos a variaciónes: se aconseja de verificarlos contactando el número telefónico indicado en la sección “Contactos”.
Entrada gratuita
Personas con discapacidad: accesible.
Fotos y videos: se pueden tomar fotos y videos, para uso privado y sin fines de lucro, con cualquiera dispositivo desprovisto de flash y trípode. No se permite el uso de palos para autofotos. La utilización de imagenes y películas con finalidades publicitarias, comerciales o de prensa está consentida solo con autorización previa.
Animales: se permite el acceso al monumento de animales de tamaño pequeño únicamente si en brazos o insertados en transportín.
Contactos
Se trata de los cimientos de una elegante residencia romana situada fuera de las murallas; se pueden distinguir algunas de las habitaciones, con restos de pavimentación en mosaico y vestigios de un dispositivo de calefacción.
Las excavaciones arqueológicas de la villa suburbana de la región de Consolata se realizaron en 1971, después de obras civiles, y sacaron a la luz la mayor parte de las estructuras antiguas visibles en aquel momento; nuevas excavaciones realizadas a mediados de los 80 permitieron conocer mejor la parte central del complejo (atrium tetrástilo con impluvium, tablinum).
Situada en una zona que presenta importantes evidencias de haber sido habitada antes de la fundación de Augusta Pretoria (25 a.C.), cercana a un tramo subcolinar del trazado viario antiguo hacia Alpis Poenina - Gran San Bernardo, la villa presenta una planta rectangular compacta en la que predominan las estancias de tipo residencial (pars urbana) reservadas al “dominus” y sus huéspedes y son menos las dedicadas al servicio, el almacenamiento y, eventualmente, la elaboración de productos agrícolas (pars rustica y fructuaria); sin embargo, la mera presencia de estos últimos, si bien limitada, revela una conexión con las actividades típicas de un “fundus” (poder, posesión).