Itinerarios deportivos: Issogne

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Saint-Solutor - Mont-Blanc

Excursiones de un día  -  Issogne

La excursión tiene su inicio en la iglesia de Saint Solutor, en la localidad de Fleuran, donde existe un aparcamiento en las inmediaciones de la iglesia. Se asciende por el sendero (sendero núm. 4) que inmediatamente se torna empinado y mantendrá una marcada pendiente todo el tiempo. Se pasa entre hileras de vides situadas en un barranco para alcanzar en breve Créton donde hay una hermosa planta monumental (Laurel - Laurus nobilis). Se sigue por la izquierda y tras pasar una pasarela sobre el torrente se encuentra el cruce con el sendero nº 5 que se reinserta en el valle por la derecha; continuando por el sendero 4, que ahora asciende en continuas curvas, se alcanza el Mont-Blanc situado en un pequeño claro rodeado de bosque.

Visey – Alpe Aveuil

Excursiones de un día  -  Issogne

Empieza en Visey-Dessus y se parte recorriendo el largo sendero que conduce a Brenves, llegado un cierto punto, nos incorporaremos, a la derecha, al sendero número 3, que conduce a Aveuil. Siguiendo el sendero 3, se llega al gran prado de Aveuil, donde también hay un pasto de montaña. Desde el pasto de montaña se puede apreciar un amplio panorama sobre el valle inferior.

MOTOTOUR - Pont-Saint-Martin - Verrès - Issogne (ida y vuelta)

Motociclismo  -  Pont-Saint-Martin

ITINERARIO EN MOTO A LOS CASTILLOS DEL BAJO VALLE DE AOSTA

En moto, salga de Pont-Saint-Martin: los viñedos en terrazas le acompañarán hasta Donnas.
Luego verás destacarse la orgullosa silueta del fuerte de Bard, antiguo baluarte de defensa situado estratégicamente en el punto más estrecho del valle central.
Con el transcurso de los siglos, sufrió numerosos asaltos, hasta el decisivo, el de la armada de Napoleón, que lo asedió y lo destruyó en el 1800. Los Saboya lo reconstruyeron en el 1827. Los museos y las importantes exposiciones temporales del Fuerte merecen una parada.

Diez kilómetros más adelante, se topará con una otra estructura imponente: el castillo de Verrès, del siglo XV, abierto a visitas.

En el camino de regreso, no se pierda el castillo de Issogne, una magnífica mansión renacentista.

También es posible hacer una sabrosa parada en Arnad, sede de la producción de "Lard d'Arnad", y en las bodegas de Arnad y Donnas.