Las residencias turístico-hoteleras, también llamadas Residence-Hotel, son una modalidad de acogida muy flexible, adaptada a un elevado número de exigencias.

Son establecimientos que ofrecen un servicio de alojamiento en locales amueblados dotados de dormitorio, baño y cocina y servicios accesorios típicos de los hoteles: recepción, desayuno, limpieza, cambio de sábanas y toallas, espacios comunes.

La residencia turístico-hotelera se dirige a turistas que busquen la comodidad y los servicios de un hotel pero al mismo tiempo deseen disponer de una minicocina para poder conducirse de forma autónoma en la organización de las comidas.